Quizá te has mudado con frecuencia y, esta ocasión, sólo es una más en tu historia, sin embargo, puede que sea la primera vez que lo haces y por lo tanto sientes que simplemente es demasiado.
Si es la primera vez que te mudas y ya ves signos de agotamiento, respira profundo y lee la siguiente lista de recomendaciones generales para mudanzas exitosas. Prometemos que tu experiencia será la mejor.
Tira todo lo que ya no uses
Lo que no necesites. Si al empacar tu ropa descubres prendas que han ido de casa en casa contigo o que han permanecido años colgadas sin que las uses una sola vez, desaparécelas para no cargar con ellas. Aplica la misma regla cuando se trate de trastes de cocina o de los tiliches de la bodega.
Empaca al vacío
Compra unas bolsas resistentes de plástico y empaca tu ropa y blancos al vacío para ahorrar espacio y poder hacer la mudanza de tu ropa de una sola vez. Esta es una de las mejores recomendaciones generales que puedes recibir.
No hagas la despensa antes de irte
¿Para que qué viajar con todos esos frascos, latas y paquetes de la despensa? No hay necesidad. Mejor prográmate, trata de agotar tus provisiones y luego una vez en tu nueva casa, ve al mercado y surte tu alacena. Te ahorrarás mucho trabajo.
Usa jaulas transportadoras
Compra jaulas transportadoras para poner dentro a tus mascotas y abastécete con alimento y productos sanitarios (como arena para gato) de modo que tus mejores amigos la pasen bien durante el viaje. Procura que tus mascotas viajen contigo dentro de sus transportadoras o, al menos, llevando correas de seguridad.
Ten siempre a la mano herramientas
Martillo, pinzas, cinta adhesiva, focos, fusibles con cintas de aluminio, una extensión eléctrica, un encendedor, una escoba y un trapo de limpieza. Te servirán de mucho al llegar a tu nuevo hogar.
Prepara un kit de supervivencia
Pon una botella de agua, tus lentes, tus medicamentos, una toalla limpia de baño, una muda de ropa, tus productos favoritos de tocador, tu cepillo de dientes, un bocadillo, un rollo de papel higiénico, una sábana, una almohada y una cobija limpias en una maleta que lleves siempre contigo. Te evitará sorpresas y te permitirá seguir desempacando más tarde si ya estás cansado. He aquí una de las claves para una mudanza exitosa.
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